Diseñar la ciudad en conexión con lo rural. La necesidad de promover una "alianza rural-urbana" sostenible.

Autor: Francisco Javier Sanz Larruga Catedrático de Derecho Administrativo Universidad de A Coruña
Formato: Comunicación técnica escrita
Tipo: Difusión de Proyecto
Temática: Desarrollo rural; Renovacion urbana
ODS relacionados: Reducción de las desigualdades, Ciudades y comunidades

Documentos asociados: Doc. Escrito

Resumen:
La indiscutible interdependencia entre las ciudades y sus áreas periurbanas y rurales requiere una adecuada articulación bajo la consideración del territorio como un «sistema único e integrado» y un verdadero «gobierno del territorio» que, de forma inteligente y participada, potencie sus sinergias positivas. Para tal fin no es suficiente aplicar las potencialidades del desarrollo urbanístico sostenible, no basta la ordenación urbanística, es preciso poner en marcha una «planificación estratégica innovadora» a escala de las Comunidades Autónomas (e incluso, cuando proceda, supramunicipal o comarcal). Para esta tarea está pendiente una verdadera ordenación del territorio y de ordenación rural, ya que los intentos realizados hasta el momento no han logrado evitar problemas de falta de cohesión territorial como es el caso del despoblamiento rural en España (o, como efecto, opuesto, la litoralización de la población). El impulso de la futura PAC puede ser una buena oportunidad para intentarlo. Sin duda que tan urgente tarea ha de partir de una generosa colaboración intermunicipal mediante las fórmulas organizativas que prevé la legislación de régimen local (áreas metropolitanas, comarcas, mancomunidades, etc.) pero no siempre ha sido posible por falta de voluntad política. En el panorama jurídico-administrativo español cabe destacar algunas experiencias locales de éxito que pueden servir de referencia para el futuro de las relaciones rural-urbanas, como es el caso de la ciudad de Vitoria-Gasteiz, su «anillo verde» y su emergente «agricultura periurbana» como factor de sostenibilidad urbano-territorial; o la inserción de la «infraestructura verde» en la ordenación territorial y urbanística de la Comunidad Autónoma valenciana que puede contribuir a mayores conexiones urbana-rurales. Más recientemente, me parece que encaja muy bien en el modelo que propugnamos la solución jurídica que ofrece la Ley 5/2018, de 6 de marzo, de la Huerta de València, sobre el suelo rural periurbano del municipio de Valencia31. Y, por lo que se refiere a la experiencia comparada destaco el supuesto de los «contrats de ré-ciprocité» y «ville-campagne» promovidos por el Ministerio francés de cohesión de los territorios y de relación con las entidades locales desde 2015. En palabras de uno de los más conocidos pioneros de la sostenibilidad, el economista alemán E. F. Schumacher (autor de la germinal obra Lo pequeño es hermoso): «La vida humana, para serlo plenamente, necesita la ciudad; pero también necesita los alimentos y otras materias primas que se obtienen del campo. Todo el mundo necesita un pronto acceso tanto al campo como a la ciudad, lo suficientemente cerca como para que la gente pueda visitarla y volver un día. Ningún otro modelo tiene sentido humano». Pues bien, los juristas tenemos por delante el apasionante reto de indagar en las fórmulas e instrumentos sostenibles hacia una verdadera alianza entre la ciudad y el campo.

Este proyecto cuenta con la financiación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través de la convocatoria pública de subvenciones a entidades del Tercer Sector para actividades de interés general consideradas de interés social en materia de investigación

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