Cuando se habla de avanzar hacia una economía circular que cierre los ciclos materiales frente a un sistema de producción, uso y desecho lineal, se evidencia que uno de los grandes retos para alcanzar este objetivo se encuentra al final del ciclo, prestándose atención a la innovación para la gestión de los residuos, así como a la optimización de algunos flujos clave como son el energético o el ciclo hídrico.

Sin embargo, se estima que hasta un 80% del impacto ambiental que tiene un producto a lo largo de su vida viene determinado durante la fase del diseño de ese producto; de tal modo, la fase de diseño de un producto tiene una influencia fundamental en la duración de su ciclo de vida, su eficiencia en el uso de materiales y energía, la cantidad de residuos que genera y la facilidad de gestionar los mismos para su recirculación. Es por ese motivo que el Ecodiseño, entendiendo así a la disciplina del diseño centrada en la optimización de la sostenibilidad de un producto, servicio o incluso un modelo de negocio, se constituye como un pilar fundamental para transformar nuestro sistema productivo y de consumo en un sistema circular verdaderamente eficiente.

El Plan de Acción de Economía Circular de la Unión Europea reconoce este papel central del ecodiseño, abordando como primera prioridad de este documento establecer un marco común de requisitos de ecodiseño que vaya más allá de los productos electrónicos, ya regulados mediante la Directiva de Ecodiseño de 2014; estos requisitos perseguirán mejorar la durabilidad, reutilización, actualización y reparabilidad de los productos; favorecer una mayor reciclabilidad, reducir la huella de carbono e hídrica y evitar la obsolescencia prematura, entre otras.

El comité técnico CT.50 de Ecodiseño de Conama 2020 continuó la labor emprendida en anteriores ediciones para mostrar las principales tendencias en ecodiseño del mercado de productos, servicios y modelos de negocio.

En la primera parte de la sesión se abordó tanto unas ponencias como un debate sobre la aplicabilidad de la ecomodulación de las tarifas de los productores, que permita premiar a aquellos que pongan en el mercado productos con mejor comportamiento ambiental. La aplicación de la ecomodulación no es una cuestión sencilla pero este desafío podrá servir de palanca para generalizar el ecodiseño de los productos.

En la segunda parte de la sesión, Conama 2020 acogió una edición más del ya tradicional Concurso de Ecodiseño, con el que se premia a los proyectos más destacados en materia de diseño con objetivos de sostenibilidad y ambientales. Los ganadores fueron los proyectos Recyycle, dedicada a la reparación de productos plásticos; Mascarillas Arpe, experta en el diseño y fabricación de mascarillas reutilizables; la Plataforma de Ingeniería de Madera con su proyecto LIFE EcoTimberCell; y la Empresa Municipal de Aguas de La Coruña con el proyecto BIALAC, de valoración del suero de la industria láctea, que obtuvo el galardón del público.

Puedes disponer del resumen de la sesión elaborado por los voluntarios de la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA) pinchando aquí.

Más información en:

Concurso de Ecodiseño de Conama 2020

Los 8 finalistas del Concurso de Ecodiseño

Plan de Acción de Economía Circular